Nos vamos de boda!

   Bueno, me voy yo! Vosotros os limitaréis a leerme y a decir "Por dios pero que monisima ibas!" - hacedlo porfi, me haríais muy feliz jaja-

   Ya es oficial, he decidido ir - bueno, siempre quise ir, será mi primera boda en España. Y ando de un contento que ni os cuento - 

  Pues resulta que se casa mi niña - ¿perdona, ¿quién? Preguntareis - Y como buena redactora -o al menos maja- os lo diré. Mi queridisima ex-compi de piso, la mejor que he podido tener - a decir verdad, el resto no os ofusquéis que a algunos también os aprecio y tal -

  De esas chicas con las que puedes ver RESCATE EN NUEVA YORK -vieja gloria del cine postapocaliptico de los 80- y que te parezca un peliculón solo por nuestros comentarios en off. O tener una depresión y solucionarla con 2 kilos de gelatina de limón y mantita en el sofá. Y resulta que ahora ¡Se me casa!

  Aunque realmente este post no iba a ir de eso, sino de - muy de chicas - ¿qué me pongo? Porque la idea era hacer una boda en la playa, rollo Ibicenco

Algo así. Todo rollo muy hippie vamos

  Porque, otra cosa no se, pero para las bodas, hay una ley que dice que "hay que ir emperrifollá" pasándose por el forro los deseos de los novios -¿qué sabrán ellos?, ni que fueran los organizadores...o algo así como los que se casan- Es más hay una famosa frase cuando preguntas hasta que escala te arreglas y es ¿Pero...arreglada estilo...cómo pa boda?

  

  Me parece exagerado, ya se que muchas tienen miles de vestidos que no se han puesto más de una vez y una boda es la ocasión perfecta para estrenarlos, pero tampoco es como para ponerse así. Mi mama -sabia mujer donde las haya- siempre me decía que en días como esos la única regla que se aplica es que "¡si la novia pide algo, se hará su coluntad!" No importa lo que sea, desde tomarte un chupito de tequila 2 segundos antes para calmar los nervios, a usar tu bolso como el suyo. Y eso es así.

  Y aquí no acaba mi indignación, ¿qué me decís de esos tacones? como sigan con este ritmo acabaran poniéndose zancos. No puedo creer que se considere normal llevar unos zapatos con los que no se puede aguantar más de 3 horas. Y se ha normalizado tanto que ahora en el baño de señoras de las bodas, hay una cestita de bailarinas. Ya se que antes muerta que sencilla, y que un tacón es muy bonito y estiliza muchisimo el tobillo y mierdas varias, pero resulta que si andas cuan pato mareado -sin contar con que si vas algo achispadas, ya es de risa - dejas de ser hermosa.

   Os voy a contar un secreto, los tacones eran cosas de hombres, sisi resulta que históricamente los primeros que los llevaron fueron los hombres -desconozco las razones exactas, pero supongo que era para verse más altos. Complejos everywere jajaja- Y años después las mujeres empezaron a usarlos para verse más varoniles. Menudo cambio de mentalidad eh!

  En cuanto al maquillaje -cuan escopeta de Homer- ni hablamos. Para eso me remito a una entrada de mi amiga -que sino acabo haciendo una entrega de lo más criticona- del desván de Aurora jajaja

Y con esto me despido, hasta la próxima entrega.

Y de regalo, os dejo el enlace de la peli arriba mencionada: 1997: Rescate en Nueva York -si el enlace caduca, lo buscáis vosotros-